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Este pequeno palácio oferece uma referência para compreender como eram as residências aristocráticas árabes. No século XVI, a torre era chamada de Ruiz e Quintarnaya, em referência ao seu morador. No entanto, a partir do século XVII, recebeu o nome atual devido à lenda de Washington Irving sobre as princesas Zaida, Zoraida e Zorahaida.
A Torre-palácio está situada na muralha leste, entre a Torre da Cativa e a Torre do Cabo da Carreira. É uma construção de dois andares atravessada por um fosso e pelo adarve. O acesso é feito por um passadiço com uma abóbada de mocárabes, pintada para imitar tijolos, uma característica única na Alhambra. Este passadiço conduz a uma sala central retangular, que possui pavilhões nos lados menores e é coberta por uma lanterna decorada com mocárabes. Ao redor da sala central, abrem-se janelas para o exterior, localizadas em três salas laterais, estreitas e retangulares. A sala paralela à muralha é maior que as outras duas e apresenta dois arcos festonados que conduzem a alcovas.
A decoração que cobre esta torre é a mais recente da Alhambra, evidenciando o declínio da arte nazarí, com motivos "pobres e repetitivos", segundo Torres Balbás.