La Alhambra declara prioritario el cambio del pabellón de acceso

El Patronato de la Alhambra y Generalife ha declarado prioritario en su plan director la transformación integral del pabellón de acceso al monumento por el Generalife para adaptarlo mejor a las necesidades del monumento y propiciar así su mejor integración en su entorno paisajístico.
La reforma, como informó ayer el diario Ideal, implicará la demolición del actual pabellón, una instalación construida en 1996 tras un concurso internacional de ideas promovido por la anterior dirección del monumento, y cuyo resultado fue muy controvertido por la contestación que generó su aspecto arquitectónico.

"Ahora mismo ese lugar no se percibe como un lugar que presente el servicio de mejor calidad" para el que fue concebido, recordó ayer la directora del Patronato, María del Mar Villafranca. La pretensión del equipo directivo de la Alhambra es que el pabellón de acceso pase a denominarse Atrio, "una idea que engloba muy bien el área de recepción que permitirá el aprovechamiento del entorno de huertas que había en la zona y que responda a esa idea de integración paisajística con la que trabaja el patronato".

La reforma afectará al área de la Plaza de la Alhambra, el Pabellón del Agua y las Casitas de la Mimbre. "No va a ser un concurso internacional, sino una invitación a equipos de arquitecto de reconocido prestigio que deberán ceñirse a las necesidades que les planteamos y a la integración pasajística, que también exigimos", señaló Villafranca.

La futura recepción englobará taquillas, una tienda-librería, cafetería, servicios, una zona para el sector turístico, el proyecto Alhambra Educa, es decir, "todo lo que se espera encontrar en un sitio así, importante, donde llegan la mayor parte de los turistas, por lo que hay que tener cuidado de que la imagen sea acorde con el entorno".

La directora del Patronato de la Alhambra consideró "prematuro" aventurar plazos de ejecución del proyecto, toda vez que la zona es "sensible" desde el punto de visto arqueológico. De hecho, está documentada la existencia del ramal de una acequia, que presumiblemente aparecerá en las obras de reforma para la construcción del futuro Atrio.