Utilizamos cookies propias y de terceros para ofrecerle nuestros servicios, mostrar vídeos, obtener estadísticas y ofrecerle publicidad personalizada. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón Aceptar o configurarlas o rechazar su uso pulsando el botón Configurar. Más información en nuestra política de cookies.
Utilizamos cookies propias y de terceros para ofrecerle nuestros servicios, mostrar vídeos, obtener estadísticas y ofrecerle publicidad personalizada.
Cookies técnicas
Son aquellas que permiten la navegación a través de la página web y la utilización de las opciones y servicios que se ofrecen. Le permiten mantener su sesión. Esta web utiliza cookies técnicas propias y de terceros. Estas cookies son necesarias para que el sitio web funcione y no se pueden desactivar.
Cookies de análisis
Son aquellas que permiten el seguimiento y análisis del comportamiento de los visitantes del sitio web. La información recogida mediante este tipo de cookies se utiliza para la medición de la actividad del sitio web, así como la elaboración de estadísticas y perfiles con el fin de mejorar el sitio web. Esta web utiliza cookies de análisis de terceros.
Cookies de publicidad comportamental
Estas cookies almacenan información del comportamiento de los usuarios obtenida a partir de sus hábitos de navegación, lo que permite desarrollar un perfil específico para mostrar publicidad en función del mismo. Esta web utiliza cookies de publicidad comportamental propias y de terceros.
Más información en nuestra política de cookies.
Als Mohammed V. Nachfolger seines Vaters Jusuf I. wurde, beendete er nicht nur die begonnenen Renovierungsarbeiten, sondern fing auch an, sein großes Werk zu bauen, dass er der Alhambra hinterließ: den Löwenpalast (Palacio de los Leones). In diesem Palast waren die Privatgemächer der königlichen Familie untergebracht. Er wurde in den Winkel zwischen den Bädern und dem Myrtenhof gebaut.
Dieser Palast ist eine Meisterleistung der Nasridenkunst, die hier unvergleichliche Schönheit und Harmonie erreicht. Licht, Wasser, Farben und Dekor wandeln diesen Palast in ein Vergnügen für die Sinne. Die abstrakteren und geometrischeren Dekorationsformen aus vorhergehenden Epochen wichen einem naturalistischerem Stil, der ohne Zweifel auf christlichen Einfluss zurückgeht, da Mohammed V. mit Peter I., dem Grausamen, zu jener Zeit christlicher Monarch, befreundet war.
Der Palast hat einen zentralen Hof, der von Säulengängen im Stil des christlichen Kreuzganges umgeben ist und über die man zu verschiedenen Sälen kommt: im Westen zum Stalaktitensaal, im Osten zum Königssaal, im Norden zum Zwei-Schwestern-Saal, zum Ajimeces-Saal und zum Aussichtspunkt Daraxa sowie im Süden zum Abencerrajes-Saal und zum Harem.