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Un fin de semana perfecto: qué ver en Granada

Para un fin de semana en Granada, descubre los lugares esenciales que ver en Granada, como la Alhambra, el encantador barrio del Albaicín y las cuevas de Sacromonte. Este itinerario te guía para disfrutar al máximo de la historia, cultura y vistas inolvidables de la ciudad en solo dos días.

 

Día 1. Viernes tarde

Carrera del Darro, el paseo de los Tristes y el Albaicín.

Partimos desde Plaza Nueva, la plaza más antigua de la ciudad. Ha sido lugar de encuentro y diversión para los granadinos en todas las épocas. Se construyó sobre el embovedado del río Darro y está rodeada de varios edificios y calles muy importantes. El palacio de la Real Chancillería se encuentra en el centro de la plaza y fue construido entre 1531 y 1587. En su diseño participaron arquitectos renacentistas de renombre como Diego de Siloé o Francisco del Castillo el Mozo, autores del patio y la fachada respectivamente.

En este mismo lugar se encuentra la iglesia de San Gil y Santa Ana. Este templo alberga importantes obras de imaginería religiosa pertenecientes al escultor barroco José de Mora. También es lugar de reposo para personajes ilustres de Granada.

Continuamos nuestro recorrido por la Carrera del Darro. Esta calle es una de las más estrechas de la ciudad, porque discurre junto a la orilla del río. A nuestra derecha y sobre nuestras cabezas se encuentra la «octava maravilla del mundo»: la Alhambra, que nos observa desde lo alto de la colina de la Sabika.

Mientras caminamos, podremos apreciar la belleza de esta parte de Granada: en ambas orillas del río se encuentran multitud de casas, algunas moriscas y reconvertidas en hoteles; otras con balcones colgantes sobre el Darro. Todo ello, junto a la arquitectura y el pavimento de piedra, conforman la magnífica imagen del lugar, también coloreada por el verde de la vegetación que rodea al río.

El puente del Cadí o puerta de los Tableros se encuentra en el Darro. Aunque actualmente solo se conserva una pequeña parte, durante el siglo XI en adelante fue una de las puertas de acceso a la Alcazaba de la Alhambra. Una reja insertada en el arco de herradura del que aún se distinguen algunas partes actuaba como compuerta e imposibilitaba el paso de intrusos. En su interior se encuentran unas escaleras de caracol que conducían hasta la orilla del río para recoger agua.

Frente a este pequeño fragmento de la historia zirí de Granada se encuentran los baños árabes del Bañuelo: uno de los monumentos con más historia de Granada y los baños árabes mejor conservados de España.

La iglesia de San Pedro y San Pablo es uno de los templos mudéjares de Granada. Desde su patio exterior se observa una magnífica panorámica del Darro y del Sacromonte. 

Frente a este templo se encuentra el Museo Arqueológico. Este museo alberga gran cantidad de restos arqueológicos que ayudan a trazar la historia de la provincia. Se halla ubicado en un palacio renacentista, la Casa de Castril, que fue propiedad de Hernando de Zafra, secretario de los Reyes Católicos. Si nos situamos frente a la casa y contemplamos su fachada, observaremos un balcón tapiado en la segunda planta. Sobre este reza una inscripción: «Esperando la del cielo». Dice la leyenda que la sentencia tiene que ver con un desencuentro entre el señor de la casa y uno de los sirvientes, que terminó siendo ahorcado en este balcón. La inscripción podría referirse a «esperar la justicia divina».

Tras nuestra parada en la Casa de Castril, continuamos nuestro recorrido hasta llegar al paseo de los Tristes. Este lugar debe su nombre a los cortejos fúnebres que pasaban por esta calle para acceder al cementerio de San José en el siglo XIX. En la esquina derecha del paseo puede observarse la Casa de las Chirimías, edificada en el siglo XVII para los conciertos que los músicos ofrecían desde el mirador del edificio. Este edificio fue uno de los primeros en introducir el barroco en Granada.

Existe un puente que une la Casa de las Chirimías con la otra orilla del Darro. Este puente se conoce también como puente de las Chirimías. Es uno de los catorce que cruzan el río Darro y en su origen los árabes lo denominaron Qantarat Inb Raxiq. Tuvo que ser reconstruido en 1882.

Desde esta orilla del río puede observarse el hoy cerrado y vallado Hotel Bosques de la Alhambra. Este edificio data del siglo XIX. Su situación en la umbría y a la orilla del Darro hizo del edificio un lugar poco conveniente para el hospedaje. Tras su clausura, el edificio tuvo diversas funciones: hospital, lugar de reunión de masones o camerino de actores, entre otros. 

Un poco más adelante y en una calle transversal, se encuentra la casa del Horno de Oro. Este edificio es una típica casa andalusí que conserva muy bien su patio con alberca y el resto de dependencias. La segunda planta es de construcción posterior, ya que tiene claras influencias de la arquitectura doméstica castellana.

Al final del paseo de los Tristes se encuentra la Cuesta del Chapiz. Desde esta empinada calle se accede al barrio del Albaicín. Durante nuestro ascenso nos encontraremos con las Casas del Chapiz, de origen morisco, datadas en el siglo XIV y conectadas por medio de un arco. Se aprovecharon para su construcción materiales de otras edificaciones como columnas y arcos. Este lugar es el punto de confluencia de la entrada al Albaicín alto y también al barrio del Sacromonte.

Frente al camino que nos lleva al Sacromonte encontraremos la plaza del Peso de la Harina, lugar en el que durante el siglo XVII se pesaba el trigo antes de ser molido para evitar el fraude de los molineros.

En nuestro paseo por el Albaicín nos toparemos con un gran número de aljibes, pequeños o grandes depósitos de agua construidos durante la etapa musulmana de la ciudad. Estos «pozos» fueron construidos tanto para el abastecimiento de agua como para las abluciones, ya que la mayor parte de ellos se encontraba junto a las mezquitas. El primero que encontraremos en nuestro ascenso será precisamente el aljibe del Peso de la Harina. Más adelante encontraremos otro, el del Salvador, anexo a la iglesia del mismo nombre. Esta iglesia fue edificada sobre la mezquita mayor de Granada y conserva su hermoso patio original.

Continuamos nuestro itinerario por una de las calles principales del Albaicín: la calle Pagés. Aquí podremos encontrar distintos establecimientos como bancos o bares, además de una de las casas moriscas más famosas de Granada, la casa de los Mascarones, llamada así por las dos máscaras de piedra de su fachada. Actualmente es una propiedad privada que no puede visitarse.

Nuestra siguiente parada es la iglesia de San Bartolomé. Lo más llamativo de este templo es que aún conserva en su subsuelo el aljibe de la primitiva mezquita que ocupaba este lugar.

Muy cerca de este templo se encuentra plaza Larga, centro neurálgico del Albaicín. En uno de los extremos de esta plaza se ubica el arco de las Pesas, una de las puertas de la desaparecida muralla de la alcazaba Qadima.

A tan solo una calle de plaza Larga se encuentra el palacio de Dar-al-Horra. Este palacio fue el lugar de residencia de la madre del último rey de Granada: Aixa había sido repudiada por su marido y tuvo que abandonar la Alhambra. Es uno de los mejores ejemplos de arquitectura civil nazarí en Granada.

Por último, y para terminar nuestro primer paseo en Granada, visitaremos uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad: el mirador de San Nicolás. Este mirador es un lugar magnífico para terminar el día, ya que observar cómo la tarde cae sobre la Alhambra es una de las imágenes más bellas del mundo.

Y desde aquí comienza nuestro regreso al centro de la ciudad. Te recomendamos que bajes por la Calderería Vieja o cuesta de San Gregorio. Esta calle fue en su día una de las zonas comerciales de la ciudad. Podrás adquirir souvenirs en sus pequeñas tiendas o tomar té y pastas en alguna de las muchas teterías árabes que allí se encuentran.

Si prefieres visitar el Albaicín acompañado de un guía profesional, también te proponemos distintas opciones de visitas guiadas en Granada.

 

Día 2. Sábado mañana

Alhambra, el Generalife, alrededores y Realejo.

La Alhambra, «Castillo Rojo», fue llamada así por el color rojizo de sus paredes. Se trata de la obra más importante de la arquitectura islámica europea. Se tiene constancia de la fortaleza por primera vez en el siglo IX, pero es en los siglos XII y XIII cuando el monumento alcanza su mayor esplendor con la dinastía nazarí. Posteriormente, el emperador Carlos V, fascinado con la ciudad, se esforzó en embellecerla y también mandó construir un palacio para establecer su residencia en Granada.

El Generalife era el palacio que servía como lugar de descanso para los reyes. Se encuentra en el cerro paralelo a la Sabika y fue concebido como un lugar parecido al paraíso mahometano: numerosas albercas y patios donde el sonido del agua y de los pájaros se mezcla con el aroma de las flores que llenan las huertas y jardines.

La Alhambra atesora muchos siglos de historia y belleza en cada una de sus estancias. Por esta razón es uno de los monumentos más visitados del mundo. Para garantizar su conservación se limitó el número diario de visitantes, así que, para evitar colas y aglomeraciones, te recomendamos una visita guiada a la Alhambra con un especialista del monumento para que puedas conocerlo en profundidad. Además, un tour guiado te permitirá organizar mejor el resto de tu día en la ciudad.

Puedes optar por unirte a un tour guiado en grupo o contratar una visita guiada privada a la Alhambra con un guía exclusivo para tu grupo de familiares y amigos.

A menos de cinco minutos del complejo alhambreño se encuentra el Carmen de los Mártires, otro de los lugares emblemáticos de Granada. Se trata de un palacete con lago construido en el siglo XIX. En sus terrenos se existen diversos tipos de jardines y huertas donde viven algunos pavos reales.

Muy cerca de este carmen se encuentra la Fundación Rodríguez-Acosta, a donde llegamos por el callejón Niño del Royo. El pintor José María Rodríguez-Acosta edificó este carmen en un solar cercano a la Alhambra con una curiosa mezcla de estilos arquitectónicos. La idea del pintor era crear un lugar en el que encontrar la inspiración para su obra. Es destacable la colección de obras del pintor, su pequeño museo que alberga piezas arqueológicas y artísticas de diversos siglos, su magnífica biblioteca y los sótanos árabes.

Las Torres Bermejas se encuentran a tan solo dos minutos del carmen Rodríguez-Acosta. Se trata de tres grandes torres que formaron parte de uno de los sistemas defensivos de la ciudad durante la época zirí. Esta fortificación ha tenido distintos usos a lo largo de la historia.

Continuamos nuestro paseo bajando por la calle Aire Alta y Azacayuela Alta. Entonces llegaremos al Lavadero del Sol, en la parte más elevada del barrio judío del Realejo. Este antiguo lavadero, originario del siglo XVII, se encuentra en una plaza del mismo nombre y estuvo en uso hasta 1965.

Comenzaremos nuestro descenso por la calle Alamillos de San Cecilio y Cuesta del Realejo para finalmente llegar al Campo del Príncipe, una de las plazas más bonitas de Granada y del Realejo. Su nombre tiene que ver con la reforma de esta antigua plaza árabe con motivo de las bodas del príncipe don Juan a finales del siglo XV. Además, pocos saben que bajo ella se encuentra un gran cementerio musulmán. Actualmente es uno de los lugares con más vida de la ciudad, ya que en uno de sus extremos hay muchos bares y terrazas.

Te sugerimos que almuerces en alguno de los locales de restauración y disfrutes del ambiente alegre de la plaza.

 

Sábado tarde

Realejo y centro histórico.

Retomamos nuestro itinerario por calle Molinos hasta llegar a la plaza de Santo Domingo. En esta plaza se encuentra la iglesia de Santo Domingo, fundada por los Reyes Católicos y uno de los principales exponentes del Realejo cristiano.

Seguimos caminando por el antiguo barrio judío del Realejo hasta llegar al palacio del Cuarto Real de Santo Domingo. El edificio, del siglo XIX, está rodeado de bonitos jardines y ha sido recientemente abierto al público. Sin embargo, lo más sobresaliente del complejo es que el viejo palacio cuenta en su interior con una qubba, un oratorio islámico que formaba parte de la primitiva almunia islámica que allí se encontraba.

Tras nuestra visita al Cuarto Real de Santo Domingo, tomaremos la calle Ancha de la Virgen para llegar a una de las calles más famosas y queridas por los granadinos: la Carrera de la Virgen. En este bulevar cubierto de álamos se encuentra la basílica de Nuestra Señora de las Angustias, patrona de la ciudad junto a San Cecilio.

Desde aquí continuaremos nuestro paseo por el centro de la ciudad hasta llegar a nuestra próxima parada: la calle Oficios. En esta calle y en sus proximidades se encuentran los monumentos más relevantes del centro histórico: la Madraza, la Capilla Real, la catedral, la Alcaicería y el Corral del Carbón.

La catedral de la Encarnación es de estilo renacentista y fue proyectada en un principio por los arquitectos Gil de Hontañón y Enrique Egas, quienes diseñaron un templo de estilo gótico. Tras una visita del emperador Carlos V, este decidió dar un enfoque distinto y más moderno del que sus abuelos habían pensado para la Capilla Real. Esta capilla data de 1505 y allí yacen los Reyes Católicos en una cripta sobre la que se encuentran sus sepulcros, tallados en mármol de Carrara.

Para cumplir con las nuevas ideas del emperador, se apartó del proyecto a los arquitectos principales, a quienes sustituyó el renacentista Diego de Siloé, cuyo pensamiento era más cercano al del rey Carlos I. Posteriormente, el artista barroco Alonso Cano se incorporará a los trabajos de construcción de la catedral, llevando a cabo la proyección de la fachada. Alonso Cano también realizó algunas obras escultóricas y pictóricas que se encuentran en el templo.

Frente a la Capilla Real se ubica el palacio de la Madraza, que albergó la universidad islámica de Granada. El edificio inicial fue remodelado muchas veces a lo largo del tiempo y apenas queda nada original. Sí se conserva la bella sala del oratorio y también algunos restos de la fachada en el Museo Arqueológico.

En un lateral de la calle Oficios y frente a la catedral se encuentra la entrada a la Alcaicería, zoco árabe que en su origen estaba especializado en productos de lujo como la seda o el terciopelo. Actualmente podemos encontrar en sus tiendas cerámica granadina, taracea y otros artículos como joyas o libros.

El Corral del Carbón fue construido durante la época nazarí para guardar mercancías y también para venderlas allí mismo. Fue lugar de cobijo de mercaderes y posteriormente corral de comedias. Esta alhóndiga es la mejor conservada de la Península.

Si quieres conocer más sobre los principales monumentos del centro histórico, existen visitas guiadas por Granada.

En la zona de Plaza Nueva hay numerosos bares y restaurantes donde puedes cenar. Un espectáculo flamenco en el Albaicín o el Sacromonte sería el cierre perfecto para este día.

 

Día 3. Domingo

Sacromonte

Al barrio del Sacromonte podemos ir andando desde Plaza Nueva. Este itinerario a pie nos llevaría aproximadamente 25 minutos. Otra opción para llegar al barrio del Sacromonte es en autobús: podemos tomar el C34 en Plaza Nueva o en Gran Vía.

El barrio del Sacromonte está lleno de cuevas que sus vecinos han habitado desde hace siglos. Algunas de ellas son tablaos donde podremos disfrutar de las tradicionales zambras flamencas. También podemos acercarnos al Museo de las Cuevas del Sacromonte y visitar la Abadía.

La visita al museo resulta muy interesante. Durante el recorrido veremos diez cuevas y nos explicarán cómo era la vida de sus primeros moradores y los oficios que desempeñaban (cerámica, cestería, telar…).

Por su parte, la Abadía del Sacromonte es otro de los lugares más interesantes de Granada. Una parte muy importante de la historia de la ciudad está relacionada con este edificio religioso del siglo XVII.

Finalmente, te invitamos a contemplar la panorámica de Granada, la Alhambra y Sierra Nevada desde el monte Valparaíso, donde se asienta el Sacromonte.

Carrera del Darro
Paseo de los Tristes
Albaicín
Aljibe de San Nicolás
Mirador de San Nicolás
Patio de la Acequia en el Generalife
Lavadero del Sol
Capilla Real

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